

Preparación de la cama del paciente
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5.4.
Cama quirúrgica
El paciente quirúrgico presenta una serie de particularidades que he-
mos de tener en cuenta a la hora de realizar la técnica de la cama
quirúrgica. Debemos procurar un
fácil y rápido acceso a la cama,
ya
que tendrán su movilidad reducida por los efectos de la anestesia y
suelen, además, llevar instalados sistemas con bomba, sueroterapia,
drenajes, etc.
El material que utilizaremos será el que ya conocemos en la realización
de las técnicas anteriormente descritas, más dos empapadores (zona
pélvica y cabeza) y dos entremetidas.
Procedimiento
1
.
Nos lavaremos las manos y nos colocaremos los guantes.
2. Situaremos la ropa de la cama limpia sobre una silla, colocada de
manera que nos sea fácil alcanzarla y en el mismo orden en que
la usaremos.
3. Colocaremos la bajera y remeteremos todos sus lados, haciendo
los picos con esquina de mitra.
4. Colocaremos una entremetida a la altura de la cabeza del pacien-
te y un empapador sobre ella; de esta forma evitaremos que se
pueda manchar la cama debido a posibles vómitos durante el
postoperatorio. Además colocaremos otra entremetida y empa-
pador en la zona pélvica.
5. Situaremos la sábana encimera, manta y colcha sobre la cama.
Estas tres últimas prendas de lencería no se remeten ni en los
pies ni en los laterales de la cama para permitir un mayor acceso
del paciente a la cama.
6. Realizamos dos embozos: uno lo situaremos sobre la cabecera de
la cama y el otro sobre los pies.
7. Para facilitar un mayor acceso a la cama con el paciente post-
quirúrgico doblaremos la ropa que no hemos remetido hacia uno
de los bordes de la cama (el que más alejado quede), aproxima-
damente hasta la mitad de la cama. Después lo doblaremos a
lo largo justo por la mitad, permitiendo así un acceso casi total
a la cama.
8. No olvides que este tipo de cama no lleva almohada.
RECUERDA QUE
En las camas
quirúrgicas será
siempre conveniente
poner manta y colcha,
ya que los pacientes
tras las operaciones
quirúrgicas suelen
tener frío.